Historia y monumentos de Barcelona

Barcelona es la capital de la comunidad autónoma de Cataluña y la segunda ciudad más grande de España. Hoy en día, es la ciudad más visitada del país. Numerosos turistas son atraídos aquí por una gran cantidad de monumentos culturales e históricos. Muchos de los monumentos de Barcelona están reconocidos por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad.

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La historia de la fundación de Barcelona
tiene dos opciones, pero ninguna de las dos es correcta. Barcelona se fundó oficialmente en el año 15 a. por los romanos como campamento militar. Bajo los romanos, un pequeño asentamiento se convirtió en una ciudad portuaria bastante grande, que incluso acuñó sus propias monedas. Los restos de las murallas de la ciudad de esa época han sobrevivido hasta nuestros días.

Con el comienzo de la decadencia del Imperio Romano,
los bárbaros comenzaron a atacar la ciudad, como resultado de que a principios del siglo V la ciudad cayó bajo el control de los visigodos. A principios del siglo VIII, Barcelona fue conquistada por los árabes y permaneció en sus manos hasta el año 801, cuando fue capturada por el hijo de Carlos el Grande, Luis, tras lo cual Barcelona se convirtió en la capital de la Marca Española, que fue gobernada por el Conde de Barcelona.


Con el tiempo, los condes se fueron haciendo cada vez más independientes,
y tras la unificación de Barcelona y Aragón en 1137, su influencia se multiplicó con creces. El nuevo reino se llamó Aragón, y en poco tiempo logró tomar posesión de un gran territorio, que incluía Nápoles, Sicilia y otros reinos menores. Sin embargo, en poco tiempo, Barcelona comenzó a decaer, lo que fue provocado por la unificación de los reinos de Aragón y Castilla.

Con la apertura de América,
casi todo el comercio se concentró sobre el tráfico transatlántico, por lo que Barcelona dejó de ser el principal puerto de España. En el período de 1650 a 1654, una plaga asoló la ciudad, como resultado de lo cual murió la mitad de la población. La ciudad y sus alrededores sufrieron mucho durante la invasión napoleónica, pero al final resultó ser una bendición para la ciudad, ya que después de eso la ciudad dejó de ser agraria para pasar a ser industrial.



Durante la guerra civil, Barcelona fue capturada por las tropas franquistas,
tras lo cual muchos vecinos se vieron obligados a huir a Francia. . Posteriormente, se abolió la autonomía catalana y se prohibió el uso de la lengua catalana. Pero a pesar de todos los horrores de la guerra civil, y luego numerosas opresiones, Barcelona siguió desarrollándose económica y culturalmente. Actualmente, la ciudad es un importante centro turístico, económico, financiero, educativo y deportivo.